El laboratorio Richmond recibió en su planta de la localidad bonaerense de Pilar un nuevo lote de 560 litros del principio activo del componente 2 de la vacuna Sputnik V contra el coronavirus para continuar con la producción local, por lo que esperan tener listas más de un millón de segundas dosis para el próximo 16 de julio.
Además, fuentes del laboratorio indicaron que con los lotes ya elaborados tendrán listas para mediados de julio más de 1,3 millones de dosis del componente 1 de la vacuna rusa contra el covid-19.
A través de sus redes sociales, la empresa farmacéutica anunció este martes por la noche que había terminado las primeras 153.441 dosis del componente 2 de la Sputnik V, de las cuales enviaron una muestra al Centro de Investigación Gamaleya —desarrollador de la fórmula— para que realice el control correspondiente.
Además, Richmond lleva producidos dos lotes del componente 1 de la vacuna: uno de 448.625 dosis, que finalizó el pasado 18 de junio; y otro de 550 mil dosis, que concluyó el viernes pasado. Las muestras de ambos lotes (80 viales por cada tanda) se encuentran también en el Centro Gamaleya a la espera de su visto bueno para poder comenzar su distribución.
Semanas atrás, el presidente del laboratorio Richmond, Marcelo Figueiras, había precisado: \”Gamaleya se comprometió a terminar lo antes posible sus verificaciones finales, pero tienen muchos análisis que hacer\”.
\”Nosotros tenemos la tranquilidad de haberlo chequeado nosotros y que dieran todo bien\”, subrayó el empresario.
Se estima que el primer lote podrá ser \”liberado\” para su aplicación la semana próxima tras la confirmación del Gamaleya. En tanto, para los lotes siguientes se espera que el proceso de envío de pruebas, control por parte del centro de investigación rusa y liberación para aplicarse no supere los veinte días.
Para el 16 de julio, Richmond prevé haber producido 1.362.125 dosis de componente 1 y 1.005.000 dosis del componente 2, lo que sería clave para avanzar con el plan de vacunación y para completar los esquemas de inmunización de quienes recibieron la primera dosis de la vacuna rusa.
Más que un \”embotellado\”
En la actualidad, la planta de Richmond realiza la formulación, filtrado y rellenado de viales (envasado), un complejo proceso técnico y científico con exigentes requerimientos de buenas prácticas de manufactura. Para realizar este proceso, el laboratorio recibe el principio activo de la vacuna elaborado en el Gamaleya.
\”Este proceso no es un \’embotellado\’ simple, requiere un conocimiento técnico y científico de mucha complejidad y de mucha importancia, e implica el trabajo de muchos profesionales, tanto para la producción como para el control. Es decir, no es un proceso mecánico o tecnológico simplemente, es un trabajo científico\”, explicó Figueiras.
La siguiente etapa consistirá en la producción completa de la vacuna en la nueva planta que el laboratorio se encuentra construyendo también en Pilar.
\”La nueva planta está pensada para producir hasta 500 millones de dosis por año y ahí se podría hacer desde el principio activo hasta el envasado. Es decir, la producción completa\”, puntualizó el presidente del laboratorio Richmond.
En ese sentido, detalló que \”tendrá la capacidad de realizar productos biotecnológicos y de producir vacunas de diferentes tipos de plataforma como, por ejemplo, la de Pfizer y la Sputnik, que usan diferentes tecnologías\”.
Desarrollada por el Centro de Investigación Gamaleya, la Sputnik V es una vacuna que utiliza una plataforma (o tecnología) llamada de \”vectores no replicativos\”.
Se trata de virus que se modifican genéticamente para que no tengan capacidad de reproducirse en el organismo (y por tanto inocuos) y se usan para transportar material genético del virus contra el que se quiere desarrollar inmunidad.
En este caso, la Sputnik V usa un adenovirus humano como vector y, a diferencia de otras vacunas, utiliza dos adenovirus (uno diferente en cada dosis) en la búsqueda de una mayor y más duradera respuesta en el sistema inmunológico.
Con información de Télam.